Teorías, misterios, datos demasiado extraños para ser ciertos; Pokémon siempre se caracterizó por usar detalles de la vida real para crear sus criaturas, que a simple vista pueden parecer normales -dentro de los juegos- pero que poseen una historia un poco escalofriante. Seguro más de uno nunca se imaginó que su Pokémon favorito tendría cierta historia de fondo.
Gothitelle y la inminente muerte
Es imposible ignorar algo tan escalofriante una vez que se sabe, y en este caso al unir algunos puntos uno ve al Pokémon de una manera diferente. No negaré que al jugar, las entradas de la PokéDex es lo que más ignoro; directamente paso de manera rápida eso y continúo mi camino, o solo utilizo la Pokédex para buscar algún Pokémon en otras áreas.
Gothita y sus evoluciones tienen la historia más extraña, que si se leen por separado no llaman tanto la atención –o al menos las dos primeras– como leerlas seguido. Al principio ignoré por completo las descripción de las tres, debido a la diferencia de tiempos que me tomó evolucionar a Gothita hasta la última etapa.
La descripción de Gothita en los diferentes juegos varía, pero tienen algo en común. Todos describen cómo el Pokémon puede percibir algo que no cualquiera ve. Esta entrada por si sola no funciona, a menos que conozcas las de sus evoluciones.
La entrada de Gothorita se torna más turbia,. Explica cómo dicho Pokémon secuestra personas por la noche, «solo por diversión», tal y como se describe a Hypno, otro Pokémon supuestamente involucrado en el rapto de niños. ¿Puede que el percibir ciertas presencias le hayan provocado alguna inestabilidad? Es extraño que pase de ser una pequeña lolita a una secuestradora.
Pero lo extraño no termina aquí, sino que aumenta tras evolucionar a Gothitelle. Si uno revisa su entrada en la Pokédex, encontrará algo que supera las dos anteriores: «Sabe cuándo morirá su Entrenador». Gothitelle tiene la habilidad de predecir el futuro de su entrenador, gracias a sus poderes psíquicos. Cuanto más cerca está el final de éste, más se deprime Gothitelle, emitiendo alaridos de pena.
Puede que esas presencias que ve siendo Gothita ya le den un indicio de lo que ocurrirá. Ya sean fantasmas de Pokémon o personas que hayan muerto, o simple presencias que anuncian una desgracia rodeando al involucrado, Gothita las percibe, y no puede dejar de mirarlas fijamente. Al tener un aspecto de bebé o niño, tal vez se quede viendo debido a que no entiende el motivo por el que están allí.
Su conocimiento aumenta a medida que lo hacen sus poderes psíquicos tras las evoluciones. Gothorita comienza a tener una idea -puede que aún algo indefinida- de lo que le ocurrirá a ciertas personas. Secuestrarlas puede que sea una manera de mantenerlas a salvo. Gothitelle sabe que ese destino no puede evitarse, por lo tanto solo le resta llorar a medida que el día de la muerte se acerca.
¿Cuánto daño es capaz de hacer Muk?
No es ninguna novedad el hecho de que el anime de Pokémon difiera en ciertos detalles con los juegos, o en grandes aspectos con el manga. En este caso, podría decirse que el anime ignoró un poco la situación de Muk y las descripciones en la Pokédex sobre él.
Muk es conocido como el Pokémon Lodo, hecho con la mezcla de este y desechos tóxicos, y con un aroma bastante desagradable. Sabemos por el anime que es un Pokémon muy cariñoso que tiende a abrazar personas conocidas o desconocidas, cubriéndolas totalmente con su cuerpo.
Pero, aquí no hablamos de los detalles en el anime, sino de las entradas descubiertas en cada juego. En éstos, Muk es tan tóxico, que hasta sus propias huellas producen veneno. Una de las entradas menciona que el veneno producido por su cuerpo causa fiebre, otra habla de cómo es capaz de acabar con la vida vegetal con solo pasar cerca de ella. Incluso la misma Pokédex de Ash menciona el veneno que posee su cuerpo.
Si uno piensa sobre ello, el Pokémon es capaz de producir una gran contaminación ambiental; puede acabar con la vida vegetal, contaminar el agua e incluso enfermar a los mismos humanos. Si algo así se abalanzara sobre ti esperando un abrazo, es muy probable que te provoque un envenenamiento. Y sumado a su abrazo tóxico están los olores fétidos que su cuerpo emana, los cuales te ahogarían mientras el Pokémon te cubre con su cuerpo.
Ahora, pensar que un solo Muk es capaz de acabar con todo no tiene tanto sentido, a menos que le sumemos unos miles más. El problema aumenta con Grimer, el cual según su descripción en la Pokédex, al perder partes de su cuerpo, un nuevo Grimer sale. O para empeorar las cosas, al unirse con otros Grimer, generan nuevos tipos de sustancia venenosa. Un Grimer se multiplicaría en millones con cada paso que da, y esos Grimer luego evolucionarían en Muk.
Magcargo, el sustituto del sol
La superficie del sol puede alcanzar unos 9000 ºF (Fahrenheit), imposible de soportar para la vida en la Tierra, si no fuera por la atmósfera encargada de absorber la radiación solar ultravioleta y regular la temperatura.
Si en algún momento el sol desaparece, no hay que preocuparse. Magcargo será el reemplazo perfecto.
Según las entradas en la Pokédex, el cuerpo de Magcargo está a una temperatura de 15.000 ºF (unos 1.000 grados). Su cuerpo es literalmente magma caliente. Incluso el caparazón que lo cubre es la piel que quedó endurecida al enfriarse, siendo esta muy frágil al tacto. Si la Capa de Ozono evita que la tierra sea incinerada por el calor ¿cómo se evita el calor emanado por el cuerpo de Magcargo? Estar incluso a unos cuantos pasos de él nos haría desaparecer en un segundo.
Slugma no difiere demasiado en su evolución. Su cuerpo, el cual no posee un caparazón, esta cubierto completamente de magma. Incluso en su sistema circulatorio corre magma en lugar de sangre. Aunque no acalara la cantidad de grados que Slugma puede alcanzar, si sabemos que es común encontrarlos en grupos numerosos por zonas bastante cálidas, lo cual dicho lugar podría alcanzar unos grados altos según el número de Slugmas y la temperatura del lugar.
Pero no podemos culpar a Slugma por nada, si el pobre deja de moverse un solo segundo, su cuerpo se enfriará y endurecerá.
Yamask y la vida después de la muerte
Como si algunos Pokémon no fueran lo suficientemente escalofriantes gracias a sus descripciones, Yamask debía aparecer y llevarse el premio. Su imagen nos da una idea simple de lo que podría ser, pero su descripción en la Pokédex nos aclara todo. Yamask es un fantasma. Un espíritu de algún humano fallecido. La máscara que lleva debajo de su cabeza es una representación de su rostro humano, cuando estaba vivo, la cual al observarla no puede evitar llorar.
Este Pokémon generalmente se lo encuentra rondando en las ruinas de antiguas civilizaciones. Basado en el diseño de la máscara, podría llegar a deducirse que los Yamask son fantasmas de humanos pertenecientes a una época antigua, o más específicamente a las primeras civilizaciones. Su evolución, Cofagrigus, posee forma de un sarcófago, los cuales eran recipientes que contenían cadáveres. En el Antiguo Egipto, los sarcófagos y las técnicas utilizadas para mantener los cadáveres representaban la vida eterna, o una manera de conseguirla. Tanto Yamask como Cofagrigus podrían ser una representación de ésta; una vida eterna siendo Pokémon.
Aún así, la vida eterna no es lo que todo el mundo desea. Se sabe que Yamask tiene un gran afecto por la máscara que porta, la cual le recuerda a su rostro humano. Si alguien toma dicha máscara, es capaz de maldecir a la persona, o buscar su tesoro por todos lados, incluso museos. El gran apego que tiene Yamask por su máscara y la tristeza que le genera observarla podría ser un indicio de que aún posee memorias de su tiempo como humano, y tal vez extrañe serlo. Cofagrigus, sin embargo, ya no presta tanta atención a la máscara –que ahora lleva pegada q su frente-, en su lugar, se lo encuentra custodiando ruinas, atrapando ladrones que los confunden con tumbas en su interior y momificándolos.
La historia en si de éste Pokémon es algo incierta, teniendo en cuenta que cada Yamask posee su propia historia como humano.